Varekai - Cirque du Soleil

El circo del Sol, con fama de ser el mejor circo del mundo, atrae muchas expectativas. Sus entradas cuestan como las de una opera o un gran musical, entre 55 y 100€ para ver un espectáculo de 2 horas, con un intermedio de media hora y se recomienda estar al menos 1 hora o media hora antes, tranquilo que no te aburrirás en la carpa de espera llena de tiendas.

Lo primero que llama la atención al entrar es el despliegue de medios, un gigantesco parking creado de la nada, con decenas de asistentes para aparcar, unas entrada con una carpa donde puedes ves también decenas de trabajadores vendiendo cosas de merchandasing, palomitas, perritos calientes o cualquier otra cosa, es una sensación muy similar a cuando estás en un parque temático, donde puedes comprar de todo si quieres gastar dinero.

El nuestro caso el espectáculo comenzaba a las 20:30 teniendo en cuenta que estás allí desde las 19:30 - 20:00 cuando llega la hora del descanso te da bastante hambre, y sino te quieres gastar un dineral comprando comida de allí te recomiendo que te lleves un bocadillo y te compres un refresco del circo del Sol, tienen unos vasos de plástico duro muy bonitos que te puedes llevar de recuerdo.

Al entrar en el carpa del circo en si, la primera impresión es que en realidad no es tan grande como pensaba, es un circo de dimensiones normales, con el escenario en el centro, el fondo reservado para los artistas y el público en las alas centrar, derecha e izquierda, asientos sencillos pero cómodos y una visión casi perfecta desde cualquier sitio, no hay asientos muy alejados ni tapados por columnas, que tiene 4 por cierto, con lo que los asientos VIPs no tienen nada de especial, sólo que están al centro, más cerca del escenario y parece que puedes tener más probabilidades de interactuar con algún espectáculo desde ahí, eso si, la entrada VIPs incluso una cena y regalos en una carpa VIPs aparte, supongo que es lo que justifica su desorvitante precio, ya que el espectáculo se ve prácticamente igual desde cualquier lado.

Nosotros estábamos sentados justo al medio, ni cerca ni lejos y en el lado derecho del circo además tuvimos la suerte de estar justo en el pasillo, así que pude estirar las piernas y tener una visión casi perfecta del espectáculo. Estábamos justo entre las dos columnas de lado derecho así que tampoco nos molestaron para nada. Sin duda recomiendo esta zona para verlo, creo que los de la primera fila, aunque casi tocaban a los artistas no podían ver todo el global como nosotros, aunque si es posible siempre es mejor la zona frontal que uno de los lados.

Mientras esperábamos a que comenzara el espectáculo unos payasos pasaban por los asientos haciendo de guías a la gente, fue un comienzo muy agradable, ya al comenzar lo primero que me di cuenta fue el sonido, una serie de altavoces puestos alrededor de la carpa creaban una sensación espectacular de movimiento, como una especie de Dolby-Sorround en redondo que lo hace todavía mejor, claro que el espectáculo se realiza con músicos y cantantes de verdad que están ahí tocando y cantando mientras otros realizan sus acrobacias, pero está claro que es un playback, aunque canten y toquen de verdad. De todas formas se agradece ya que la da una sensación de realismo a la música muy agradable.

Podías ver como de vez en cuando los músicas pasaban entre los asientos del público tocando las mismas melodías que sonaban por los altavoces.

Los espectáculos eran todos acrobáticos y cómicos, no había animales, ni cosas raras como esferas de motos.

Se puede decir que los acróbatas se merecían un 9 sobre 10 en sus actuaciones, aunque pude percibir 3 fallos en todas las obras, realmente fueron deslices sin importancia comparados con lo que hacía, siempre de la mejor calidad, se notaba que eran auténticos profesionales, además solían haber como actores secundarios que no paraban de hacer cosas, para que en ningún momento te quedarás sin nada interesante a lo que mirar.

Resumiendo, creo que lo más increíble del circo del Sol es su puesta en escena, esos colores, esos juegos de luces, ropajes, música, ese ambiente es lo que que realmente lo hace especial.

Las acrobacias a fin de cuentas las podías ver por televisión o en otros circos, pero mientras estaba viendo una de ellas de repente escuché a todo el mundo aplaudir, en ese momento me di cuenta de algo, el circo del sol me había ensimismado de tal forma que perdí la noción de la acrobacia y comencé a mirar una obra de arte, como un musical o una danza, mirando esos vestidos de otro planeta, esos movimientos tan bien realizados, esos juegos de luces y sonidos tan precisos que me sentía totalmente abstraído mirando ese mundo de Oz.

Creo que el Circo del Sol es para dejarse llevar por el espectáculo más que para ver las acrobacias como suele ser típico en los circos, aunque claro, no deja de ser un circo ;)